Mucho trabajo ilusionado y la vida, con sus penas y alegrías, han conformado los 365 días que ahora se nos marchan
El año no lo comenzamos bien en nuestra hermandad. Dos de los hermanos más veteranos de la corporación, Francisco Dorador y Trinidad Villanueva, se reunían con Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y Su Bendita Madre de la Esperanza en el mes de enero. Por ello, la Junta de Gobierno decretó luto oficial hasta el mes de junio, mostrando un crespón negro nuestro estandarte, en todos los actos en los que participó la hermandad. Afortunadamente, este mes también vino cargado de buenas noticias, como la entrega de regalos a diferentes entidades benéficas o el hermanamiento de la Banda de Jesús del Gran Poder con la de la Presentación al Pueblo de la localidad sevillana de Dos Hermanas
En febrero comenzó a hacerse realidad una de las apuestas más ilusionantes de la Junta de Gobierno del año que finaliza, la puesta en marcha de la exposición ‘Esperanza en sus miradas’, una muestra de arte realizada por reclusos del Centro Penitenciario de Albolote. La exposición abrió sus puertas en dicho centro para, posteriormente, poderse contemplar en la Asociación de la Prensa y en diferentes municipios de la provincia de Granada.
Marzo nos llenó de emoción con diferentes actos de contenido puramente cofrade. El vía crucis con la imagen del Señor del Gran Poder por las calles del Bajo Albaicín o el siempre ejemplar Martes Santo de nuestra cofradía, se vieron completados por el pregón del costalero que pronunció nuestro vice hermano mayor y capataz del palio de la Santísima Virgen de la Esperanza, Luis García Quintero, que en sus palabras quiso recordar a los costaleros de la vida, personas que cada día se enfrentan a las situaciones aplicando el ‘siempre de frente’. Para el año que comienza también tendremos la oportunidad de vivir un momento similar, ya que nuestro hermano Alejandro García Morón ha sido designado para pronunciar el pregón del costalero de 2014.
El mes de abril nos hizo vivir otro bonito acto, la entrega de una reliquia de San Juan de Dios a Nuestra Madre. Fray Juan José Hernández, rector de la Basílica de la Orden Hospitalaria, colocó los restos óseos del santo de los pobres en la cruz pectoral de la Virgen de la Esperanza. Esta pieza de joyería fue realizada en el taller de Rafael Alcalá, siguiendo el diseño de José Manuel Martínez Hurtado. Pero gran parte de la actividad de la cofradía estuvo encaminada a preparar la presencia de la Virgen de la Esperanza en la procesión conmemorativa del centenario de la coronación canónica de la Patrona de Granada, la Virgen de las Angustias. Por ello, los ensayos de los costaleros y la limpieza de enseres dieron aspecto cuaresmal a los últimos días del mes de abril.
Mayo fue es mes de la Magna Mariana. En una gélida y lluviosa jornada se desarrolló la peregrinación de las imágenes marianas granadinas hasta la catedral y de ahí a la Basílica de la Virgen de las Angustias para vivir un día que quedará en la memoria de cuantos tuvimos la oportunidad de vivirlo. Nuestra corporación siempre guardará un gratísimo recuerdo del regreso de la Virgen de la Esperanza a Santa Ana, rodeada de hermanos y devotos que la acompañaron en ese ambiente festivo que rodeó la jornada.
Nuestra cofradía alargó la celebración especial del centenario de la coronación canónica de la Virgen de las Angustias, peregrinando a su basílica en el mes de junio. Y para cerrar el curso, qué mejor que hacerlo con un almuerzo de hermandad. Con los calores propios del estío, nos reunimos en el cortijo San Martín, en Moraleda, propiedad de Antonio Sánchez ‘El Compadre’. Fue un día festivo, en el que degustar un arroz y unas carnes hechas en la barbacoa fueron la escusa para despedirnos antes de las vacaciones de verano.
Unas vacaciones que no fueron inmediatas, ya que en julio hubo cabildo de iniciativas y proyectos y en el que se aprobó la realización de un ‘Guión por la vida’, que reemplazará al lazo blanco que viene portando el primer varal del costero derecho del palio de la Santísima Virgen. Con diseño de José Manuel Martínez y realizado en tisú de plata bordado en hilo de oro, esta nueva insignia formará parte el cortejo en un plazo de uno o dos años, abriendo el tramo de camareras.
Agosto nos lo tomamos como descanso, que de todo tiene que haber en la viña del Señor, aunque no dejamos de acompañar a la hermandad de la Virgen de las Nieves de Gabia, en la celebración festiva de su día. Una vez más, una representación de nuestra hermandad quiso estar presente en un acto de fe, la procesión que cada 5 de agosto recorre las calles de esta localidad del Área metropolitana granadina.
En septiembre se reanudó la actividad cofrade, con la celebración de los cultos mensuales, como cada primer domingo de mes en Santa Ana y la participación de la cofradía en la Ofrenda floral en honor a la Virgen de las Angustias. Pero, además, se pusieron en marcha las actividades del Club Deportivo Spes Nostra. Partidos de fútbol y salidas en bicicleta o senderismo son algunas de las acciones programadas.
Una de las actividades deportivas más seguidas fue la que se celebró en Rubite en el mes de octubre. El I Concurso de Pesca Virgen de la Esperanza fue un éxito de participación. Los ganadores dieron muestras de sus conocimientos en el noble arte de la pesca con caña. También ese mes se afianzó una relación de una década, la de nuestra hermandad con la Banda de Música de Santa María del Alcor de El Viso, Sevilla, al firmarse la renovación del contrato por el que cada Martes Santo seguirá acompañando a Nuestra Madre.
En noviembre se clausuraba el Año de la Fe. Con tal motivo, en la catedral se celebró eucaristía en la que estuvo presente la imagen de María Santísima de la Estrella. La cofradía albaicinera solicitó a nuestra Junta de Gobierno alguno de los objetos que forman parte del ajuar de la Virgen de la Esperanza para que lo portara la Señora de San Cristóbal; en este caso fue el ancla de Nuestra Madre la que lució la Virgen de la Estrella.
Y cerramos este resumen del año que se nos va con la visita cultural que organizó nuestra cofradía al Monasterio de la Concepción y al Camarín de la Virgen del Rosario. Fue una mañana muy agradable en la que los asistentes pudieron disfrutar de estas dos joyas del arte granadino.
Muchos más momentos quedarán en el recuerdo de cada uno de nosotros, los que tenemos el corazón verde y nunca perdemos la esperanza de llevar alegría a nuestros semejantes.
Que Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y su Bendita Madre os colmen de bienes y podamos vivir un 2014 pleno de fe, caridad y mucha Esperanza.