LA HERMANDAD CELEBRA LOS CULTOS CUARESMALES

Durante tres días, la corporación ha cumplido con lo estipulado en las Reglas, Triduo y Función Principal de Instituto en la que se impusieron las medallas a los nuevos hermanos

Como cada tercera semana de Cuaresma, la hermandad de la Esperanza ha celebrado el triduo que se convierte en la primera gran cita de los hermanos antes del esperado Martes Santo. Durante tres días, la iglesia de Santa Ana fue el escenario de las diferentes celebraciones litúrgicas, que culminaron con la Función Principal de Instituto, el domingo, en el transcurso de la cual se impusieron cerca de un centenar de medallas a los nuevos hermanos de la corporación.
Pero la gran novedad de este año en esta cita anual de Cuaresma fue la celebración, en la jornada del viernes, de un Vía Crucis presidido por la imagen de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, por las calles del Bajo Albayzín.
El rezo del Vía Crucis, seguido con devoción por numerosos fieles, ofreció la oportunidad de disfrutar de estampas inéditas, como la imagen de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder escoltado por el monumento más universal de Granada, la Alhambra, dando a la celebración un halo místico que invitó aún más a la oración.
La Función Principal de nuestra hermandad ha coincidido este año con el besamos a Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, que cada 10 de marzo se celebra en conmemoración de la bendición de la talla del Nazareno de Santa Ana. Durante toda la jornada, y a pesar de las inclemencias climatológicas, el Gran Poder recibió el fervor de los fieles.